Reseña

“Si tomamos como referencia la larga historia del tiempo, sucede que muy recientemente una nueva macrorrealidad ha cobrado fuerza propia en nuestro planeta y este libro es uno de los primeros en hablarnos de ella. Dicha realidad terrestre surgió como resultado de la civilización científico-técnica y gozó y goza de gran aceptación y popularidad, puesto que sus productos exhiben, entre otros, el peregrino atributo de transformar lo distante en cercano, lo imposible en fácil y lo inhóspito en habitable. Son tantos los objetos técnicos, tangibles e intangibles, y tan frenético y descontrolado su ritmo de producción, que en conjunto pueden ser descritos como una nueva esfera que nos envuelve. De allí el nombre que poco a poco resuena para describirla: la Tecnosfera.
El libro propone problematizar esta realidad, puesto que la Tecnosfera se erige en los espacios y a costa de las esferas naturales que han producido la evolución de la vida y que han permitido la aparición misma del ser humano. En sus dimensiones actuales, la Tecnosfera daña la vida sobre la Tierra, y su incesante crecimiento empeorará con toda probabilidad sus condiciones de desarrollo en forma rápida, masiva y permanente; la destruirá en parte.
Fiel a las intuiciones críticas de su primera obra (El desarrollo. Entre el simple crecimiento y el buen vivir, LOM, 2011), Raúl Claro nos relata el proceso de concatenación de las esferas terrestres, la Geosfera, la Biosfera y la Tecnosfera, estableciendo sus hitos fundamentales y evidenciando el giro altamente nocivo que supone esta última. A partir de ello, plantea como desafío ecológico, ético y político una nueva frontera alternativa: la Antroposfera.”