La situación de la clase obrera en China. Historia y economía política

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Reseña

“Alrededor de las ocho de la mañana del 17 de marzo de 2010, Tian Yu se arrojó desde el cuarto piso del dormitorio de la planta de Foxconn en Longhua. Apenas un mes atrás había llegado a la ciudad de Shenzhen, la megalópolis de rápido crecimiento cercana a Hong Kong, desde un poblado agrícola en la central provincia de Hubei. Como tantos millones de jóvenes de origen rural, ella deseaba un empleo en la urbe y una nueva vida en los pujantes centros industriales de China.
Pun Nga¡, Jenny Chan y Mark Selden en Morir por un iPhone
Según una encuesta no oficial de la organización CLB (China Labour Bulletin) de Hong Kong, se produjeron más de una huelga por un día desde la mitad de 2011 hasta finales de 2013. Sin duda, las cifras reales son mucho más grandes, pero no son suministradas por el gobierno. En 2014, este promedio se elevó a 2,2 huelgas por día, hasta abril. Según la organización, hubo un aumento de 31% de las huelgas en el primer trimestre de 2014, en comparación con el mismo período del año pasado.
En el régimen laboral chino, el sindicalismo independiente está estrictamente prohibido y el órgano sindical oficial monopoliza la representación de los trabajadores. Esto significa que los 806.498.521 trabajadores y trabajadoras del país no pueden crear organizaciones independientes que defiendan sus intereses, en una economía en que el 25 % de los hogares más pobres apenas poseen el 1 % de la riqueza total del país, y donde las largas jornadas, la falta de seguridad y el autoritarismo caracterizan la vida en las fábricas. Esta prohibición oficial no ha impedido que se manifieste la resistencia obrera. El número de huelgas ha aumentado a lo largo de las dos últimas décadas, y tal como escribió Eli Friedman el año pasado, “en un día cualquiera, es probable que tengan lugar entre media y varias docenas de huelgas.” ’
Hao Ren, Zhongjin Li y Eli Friedman en Jacobinmag
Los tres hombres más ricos del país (dos gurús de Internet y un magnate inmobiliario) acumulan cada uno un patrimonio superior a los 30.000 millones de dólares, según los últimos rankings de Hurun. Mientras, millones de personas luchan por sobrevivir con menos de un dólar al día.
Según estimaciones de Morgan Stanley, los ingresos per cápita de los chinos aumentarían de los actuales 8.260 dólares (posición 93 a nivel mundial) a los 12.500 dólares en el año 2027, pero según un estudio de Beida, el 1 % de la población controla un tercio de la riqueza del país, mientras que el 25 % de la población con menos recursos solo detenta un 1 % de la riqueza.”