“La memoria se impone, es menester recordar, y ello implica analizar las diferentes coyunturas que se sucedieron entre el 4 de septiembre de 1970, día de la elección, hasta el 11 de septiembre de 1973, día del golpe de Estado. Recordar por qué ese gobierno ha marcado la historia de Chile postgolpe. Por qué tiene lugar la amnesia. Sin duda, la significativa importancia de Salvador Allende,y sus casi mil días de gobierno, es lo que justifica la práctica de un olvido activo, el rencor hacia su memoria.

Al presidente se le recuerda por su discurso de la mañana del 11 y por su suicidio: una forma significativa de olvidar su obra presidencial. Allende no fue solamente un héroe cívico, fue un estadista que puso en práctica la vía chilena al socialismo; un camino hacia adelante, pacífico, democrático y pluralista. Murió por sus ideas y son éstas las que hay que recordar: las que desarrolló en su gobierno.”